Te refieres a ti en la consulta, como un ser débil que no puede con la vida, que todo es gris, que no hay alternativa, que el mundo gira loco con su gente, que no te dan lugar, que estas perdido.
Repites y repites que no puedes, sin darte cuenta legando aquí es que ya has podido, que aunque llores por amores mal habidos, estas de pie, contigo no han podido.
Hablas de tu frustración ante las cosas, que no te alcanzan, no llenan tu vació, que al desearlas tenerlas te provocan y al obtenerlas el entramado de tus deudas locas te hunden mas, solo potencian tus delirios.
Es que no has aprendido con los anos, que los objetos son inanimados, no consuelan son bálsamos etéreos que en poco tiempo quedan caducados
Cobarde no, eres valiente, reconocerte en tus defectos es coraje, sacarte las caretas que protegen lo hacen solo los que pueden mostrarse tal cual son ante la vida, sin esperar por ello recompensas, ni alabanzas que no sean merecidas.
Paso la hora y has transformado esa angustia loca en un esbozo de lo que se asemeja a una sonrisa, porque has comprendido que la suma de problemas no te han podido hundir como planteabas, que los tendrás que ir resolviendo poco a poco, que existía una luz que no esperabas.
Nos despedimos dándonos la mano en un fuerte apretón que predecía que volverías por otra consulta y que yo esperadote estaría.